El filosofo del metro dice:

El jet de los deseos
llega a la industria

Plascencia: industrial poco ortodoxo

Roberto Fuentes Vivar*

El 31 de enero y el uno de febrero se va a realizar en León, Guanajuato, la reunión del Consejo Directivo de la Confederación de Cámaras Industriales de la República Mexicana (Concamin) y el nuevo presidente de esta cúpula empresarial, Ismael Plascencia, tiene muchos asuntos que aclarar, algunos de ellos con cierta dosis de espinas.
En primer lugar, uno de los puntos que deberá ponerse en la mesa del Consejo es ¿porqué desde que tomó posesión, en octubre del año pasado, a la fecha, han salido de las filas de las cámaras que aglutina la Concamin, unas cinco mil empresas y actualmente sólo queden 56 mil 669, cuando a mediados del año pasado había más de 61 mil, según el Sistema de Información Empresarial Mexicano?.
Otro asunto que deberá explicar el guanajuatense es ¿porqué el indicador de la actividad industrial que mensualmente mide el INEGI se ha reducido en más de dos puntos porcentuales de 150.9 a 148.7 desde que tomó posesión como presidente?.
El día que tomó posesión dijo: "Basta de hablar, es hora de hacer; basta de exigir, es hora de ofrecer". Sin embargo, en los primeros meses de su presidencia, los índices del sector manufacturero del INEGI indican que el sector secundario de la economía se encuentra en niveles inferiores a 1993.
Desde el punto de vista político, muchos industriales se preguntan ¿por qué si la Concamin es apolítica, su presidente participa, según el gobierno del estado de Guanajuato, en el proyecto que encabezan el expresidente Vicente Fox y su esposa Martha Sahagún?.
Más espinoso es el asunto de la compañía Edificaciones Integrales Futura, que se encuentra en el expediente elaborado por Jesús González Schmall acerca de las operaciones de los hermanos Bribiesca Sahagún. Esta empresa, cuya protocolización corrió a cargo de la notaría de Daniel Cabeza de Vaca Hernández, habría obtenido dos créditos del Infonavit por 66.9 millones de pesos.
Según la exdiputada Sofia Castro, esta empresa, bajo la escritura pública 25287, del 13 de abril de 2004, y con registro federal de contribuyentes EIF0103162F9, fue constituida por Ismael Plascencia Núñez, Héctor Manuel Jiménez Aguirre y Esteban Favela Corral, con capital social de 50 mil pesos y 50 acciones con valor de mil pesos cada una. De este paquete Plascencia pagó por 10 acciones y Jiménez y Favela por 20 cada uno.
Otro de los puntos que deberá aclarar es acerca de la validez de la afirmación –publicada en varios medios nacionales- en el sentido de son de propiedad de Plascencia dos aviones en los que frecuentemente viajan –o viajaban- los hermanos Bribiesca Sahagún.
Además tiene que dejar en claro si es cierta su sociedad con Valente Aguirre –socio del Guadalajara – con quien supuestamente tiene varios negocios en León y en la capital jalisciense, algunos relacionados con la computación. Por cierto, varios plantes de Aguirre en Chihuahua han sido curiosamente relacionados con las muertas de Juárez.
En fin, hay muchas cosas que el nuevo presidente de la Concamin debe aclarar -sus propiedades den Baja California, en Tequila, en Puerto Vallarta y, desde luego en León- , pues hace unos años era sólo un mediano empresario de la curtiduría.
Hay que recordar que él mismo dijo a la revista Expansión cuando le preguntaron si en los Pinos habían ayudado a lograr la unidad en la Concamin: “Nada que ver. Les pedí apoyo para que comentaran de mi honestidad, tenacidad, trabajo y hasta de mi terquedad. La mayoría de los presidentes de cámaras no me conocían, se comentaba que era una persona muy débil y ellos me ayudaron a demostrar que estaban equivocados al 1,000%”.
Por todo esto, en los próximos días, en León, los industriales podrían pedir explicaciones a un presidente cuya ortodoxia no ha sido del todo clara.
filosofodelmetro@yahoo.com.mx

*Publicado en el correo de Guanajuato /30 de enero de 2007