El filósofo del metro dice:
Otros empresarios
pero la misma mugre
Mexicana de Aviación
otra vez víctima de fraude
Roberto Fuentes Vivar*
Definitivamente una de las noticias más importantes de la semana es la quiebra de Mexicana de Aviación, que tiene varios aspectos que analizar.
En primer lugar se encuentra que esta empresa acudió formalmente a la Ley de Concursos Mercantiles y un juez decidió iniciar el proceso. Según los propietarios de Mexicana de Aviación recurrir a esta ley le permitirá reestructurar de forma ordenada sus pasivos y adecuar sus costos laborales.
Cabe señalar que recientemente ha crecido el número de empresas gigantes que han tenido que recurrir a este proceso por encontrarse en quiebra. Algunas de ellas son Aviacsa, Satmex, Grupo Industrial Durango y Comercial Mexicana. En la mayoría de estos casos la quiebra era inminente por malos manejos empresariales. En otros fue la propia crisis la que las orilló a declararse prácticamente en suspensión de pagos.
Otra de los puntos interesantes es que la empresa argumenta que de no ser por los contratos de trabajo habría tenido ganancias por 3 mil 500 millones de pesos y no pérdidas por 4 mil millones de pesos.
Esta afirmación ha demostrado ser una mentira, pues lo que ha sucedido con Mexicana de Aviación no es otra cosa sino mala administración por parte del grupo empresarial que la adquirió hace cinco años.
El hecho de querer culpar a los trabajadores se le ha revertido a la empresa pues incluso ayer legisladores aseguraban que los propietarios habían incurrido en fraude maquinado por haber adquirido préstamos por 4 mil millones de pesos sin haber hecho buen uso de esos recursos.
En términos generales el hecho de que Mexicana haya acudido a la Ley de concursos mercantiles demuestra que esta empresa ha sido mejor manejada por el gobierno que por los particulares, pues es la tercera ocasión en que se declara en quiebra y en las dos anteriores (1982 y 1995) fue rescatada por las autoridades que lograron sanearla y entregarla a la iniciativa privada con buenos números.
Otra de las características que tiene esta quiebra es que la empresa ha usado diversos elementos como ofensiva antilaboral, al intentar culpar a los trabajadores. En este sentido el tratamiento mediático que se intentó presentar es muy parecido al de Luz y Fuerza del Centro, en donde las autoridades nunca se han cansado de atribuir a los trabajadores y concretamente al SME el supuesto fracaso de la empresa eléctrica.
Solo que en el caso de Mexicana no les funcionó y hasta el gobierno de Felipe Calderón se niega a un rescate, mientras que la opinión pública tiene la idea de que el fracaso se debe a la mala administración y no a los trabajadores.
Entre los malos manejos se encuentra el desvío de recursos a una empresa fantasma, también el desvío de recursos a otras aerolíneas propiedad del mismo grupo y las pérdidas asociadas al fondo Stanford. Además de el dinero que le prestaron Nacional Financiera y Banomext hace poco tampoco fue bien usado y se trata de recursos públicos.
A través de su historia, Mexicana de Aviación se ha enfrentado a muchos fraudes empresariales. El de ahora, será seguramente el último. Lo grave es que el mal manejo administrativo dejará sin empleo a muchos trabajadores. Como dice el filósofo del metro: otros empresarios, pero la misma mugre.
Comentario para Radio Educación/ 6 de agosto de 2010
0 Comments:
Post a Comment
<< Home