El filósofo del metro dice:

El terrorismo fiscal
se asomó al balcón
del terrorismo a secas

Ilegal, la publicaicón de
la lista negra de deudores

Roberto Fuentes Vivar*

El Servicio de Administración Tributaria y la Secretaría de Hacienda iniciaron el año con la espada desenvainada, al publicar la primera lista negra de deudores morosos, en la que se encuentran lo mismo políticos que personajes del espectáculo, empresas, asociaciones civiles, equipos de futbol y políticos.


Fuera del morbo que significa leer los nombres de las personas físicas y morales que están en las dos listas dadas a conocer el primero de enero, la medida de publicar o exhibir a los causantes que tienen problemas con el fisco, tiene muchas vertientes que analizar.

La primera de ellas es que se dio a conocer exactamente el mismo día en que entraron en vigor los nuevos impuestos aprobados por los legisladores como parte de la reforma hacendaria y que han causado malestar en diversos sectores.

¿Por qué el secretario de Hacienda Luis Videgaray y el jefe del SAT, Aristóteles Núñez publican esa lista el primer día del año y en medio de una polémica que todavía no acaba sobre la validez de algunos de los nuevos impuestos?

La respuesta es que se trata de una medida disuasiva para tratar de desalentar la evasión y fomentar el pago de impuestos, pero por sus características puede considerarse como una especie de terrorismo fiscal.

No es la primera vez que se presentan en México situaciones similares. Hay que recordar que Carlos Salinas de Gortari recurrió a perseguir a algunos grupos empresariales para emitir un mensaje de que no se permitiría la elusión de impuestos. Claro que nunca atacó a sus amigos.

Así parece ser en esta ocasión, pues la mayoría de los políticos mencionados en la lista son panistas o de partidos diferentes al PRI, aunque hay algunas excepciones como el priista Fausto Alzati, quien es el director de Televisión Educativa.

En el caso por ejemplo de los medios de comunicación, se menciona a El Heraldo de México, una empresa que hace ya casi dos décadas que fue vendida a José Gutiérrez Vivo y que por lo tanto no existe, pero sí conlleva un mensaje para que los medios de alineen en el pago de impuestos.

Otra delas cuestiones que debe analizarse es que, desde el punto de vista de la transparencia, puede considerarse positivo que el SAT informe acerca de las empresas que defraudan al fisco. Sin embargo, la propia dependencia ha sido tajante al no dar a conocer a muchos de los grandes consorcios beneficiarios de medidas como la consolidación fiscal, por lo que aún en el caso de la transparencia la medida deja mucho que desear.

En la óptica legal, la Procuraduría de Defensa del Contribuyente, consideró la posible violación a los derechos fundamentales de los causantes pues el SAT no puede ejercer esta nueva facultad de dar a conocer los nombres y el RFC de los deudores, si no lo hace con estricto apego y respeto a los derechos los contribuyentes que están establecidos en la Constitución. La respuesta del SAT fue estudiaría la posición de la Procuraduría, pero reiteró que la publicación fue hecha conforme a derecho.

Pero en términos generales, esta primera publicación parece ser una acción más cercana al terrorismo fiscal que a una mejor recaudación y como muestra el propio SAT anuncia que las listas serán permanentes y que próximamente se darán a conocer los datos de las empresas que simulan operaciones y emiten facturas apócrifas. Como dice el filósofo del metro: Del terrorismo económico al terrorismo fiscal, sólo hay un paso.

*Comentario para Radio Educación/ 3 de enero de 2014