El filósofo del metro dice:
Los recursos del subsuelo,
son para emprerder el vuelo
Qué sigue para el litio, tras la
aprobación de la ley minera
Roberto Fuentes Vivar*
Finalmente ya se aprobó la nueva ley minera que más que nacionalizar el litio lo reserva al estado para su explotación, con lo que se eliminan de tajo muchas especulaciones informativas y financieras relacionadas con este mineral, que provocaron en años recientes una ambición desmedida por parte de empresarios nacionales y extranjeros.
La iniciativa privada ha intentado desvirtuar la nueva ley con argumentos que pueden considerarse infantiles y que son contradictorias en sí mismos, que el litio ya estaba nacionalizado, que no hay litio en México, que en caso de que lo hubiera sería casi imposible de explotar, que nuestro país carece de tecnología y de profesionales capaces de aprovecharlo para producir baterías y muchos mitos más.
Hace un mes, Rompeviento y la Universidad Autónoma Metropolitana realizaron un reportaje (que ya tiene casi un millón de visualizaciones en YouTube) llamado “México Litio, al descubierto”, en cual desmienten estos mitos. El resultado fue que los productores del reportaje (la académica Violeta Remedios Núñez y el director de Rompeviento, Ernesto Ledesma), fueron amenazados de muerte por la difusión de ese trabajo periodístico y han recibido la solidaridad de varias universidades y agrupaciones gremiales.
Paralelamente cada día queda más al descubierto que los intereses nacionales e internacionales intentaban explotar el litio mexicano con acciones casi en lo oscurito, con operaciones dirigidas por grandes capitales internacionales en colaboración con funcionarios del gobierno de Enrique Peña Nieto.
El ejemplo más claro es el proyecto Sonora Littium, Bacanora Minerals o Ganfeng Lithium, un plan que comenzó con una inversión inicial de siete millones de pesos que se pagaron para adquirir los derechos a un particular que tenía la concesión) y al poco tiempo alcanzó un valor de nueve mil millones de pesos.
En sus diferentes etapas, tiene (o ha tenido) inversión de los gobiernos de China y Omán y participación británica, canadiense y japonesa. Detrás del proyecto está un personaje cercano a Enrique Peña Nieto:Andrés Antonius González (coordinador de planeación estratégica y subsecretario de Agricultura y Política Energética, en el gobierno anterior). También se encuentran la exgobernadora priista de Sonora, Claudia Pavlovich, Martín Fernando Vidal Torres, quien hasta 2017 era presidente y director general de Bacanora Minerals (apoderado legal de las concesiones de Borax, Mexalit y Megalit, filiales del consorcio) y Jorge Vidal Ahumada (ligado a Pavlovich y a Ricardo Salinas Pliego).
En enero de 2018 (en los últimos meses del gobierno de Enrique Peña Nieto) la empresa publicó un Estudio de Viabilidad de Sonora en el que se indican posibles utilidades de antes de impuestos por mil 250 millones de dólares, con 26 millones de impuestos y un costo operativo de alrededor de cuatro mil dólares por tonelada. Ya ha producido carbonato de litio de alta calidad y podría producir 17 mil 500 toneladas de litio anualmente.
Ya en este sexenio, la página de la Secretaría de Economía, explicaba: “El Proyecto Litio Sonora, consta de 10 concesiones que confieren derechos para la exploración, extracción y producción.
Pero no es el único caso. De hecho, el presidente, el martes anunció que se revisarían los ocho casos en que existen concesiones para el litio para saber si operan de manera legal.
La voracidad de los empesarios llegó a tal grado que incluso ayer la Secretaría de Economía denunciaba la existencia de cámaras empresariales piratas en materia de litio, como es la supuesta Cámara Mexicana del Litio, dirigida por Marco Antonio Sánchez Contreras, un personaje es cercano al senador (minero de Morena) Armando Guadiana, quien propuso que se invite a privados a participar en la empresa estatal.
Y ya terminada la especulación que ¿que es lo que sigue?
Primero: Conocer el estado real de los proyectos ya iniciados (entre 13 y 31, según diversas fuentes para aprovechar las experiencias de las empresas nacionales y extranjeras que han avanado en la proyección y exploración.
Segundo. Dotar al servicio geológico mexicano de los recursos necesarios para realizar un inventario real del litio mexicano.
Tercero. Investigar las eperiencias internacionales, quizá comenzando con la Bolivia, pues con Evo Morales ese país se convirtió en una potencia en litio, al nacionalizarlo, crear una empresa estatal para su aprovechamiento, firmar acuerdos con empresas tecnológicas extranjeras (sobte todo alemanas y chinas) para su explotación y hasta logró fabricar un auto eléctrico, antes del golpe de Estado, el cual tuvo entre otras razones prcisamente el aprovechamieento del litio.
Cuarto.- Utilizar las experiencias nacionales en aprovechamiento de tecnologia (hay empresas que ya hacen baterias por ejemplo para motos con litio mexxiano) y buscar las asociaciones internacionales necesarias para su aprovechamiento.
Quinto.- Crear la empresa paraestataal correspondiente y dotarla de elementos legales para su operación y generar un plan integral de explotación de litio.
Sexto.- Eliminar cualquier viso de corrupción en todos los procesos de producción de este mineral llamado el oro blanco.
Dice el filósofo del metro: Los recursos del subsuelo deben ser para emprender el vuelo.
*Comentario para Radio Educación/ 22 de abril de 2022