El filósofo del metro dice:
Esto no es joder a México,
es joder a los mexicanos
Ganancias de bancos: 60 mil mdp
Pérdidas de Pemex: 118 mil mdp
Roberto Fuentes Vivar*
En
estos días todas las grandes empresas están presentando sus reportes
trimestrales correspondientes al tercer trimestre del año a la Bolsa Mexicana
de Valores y si se analizan con cuidado podemos ver que la mayor parte
contienen malas noticias.
Concretamente,
Petróleos Mexicanos (Pemex) registró una pérdida neta de 118 mil 357 millones
de pesos en el tercer trimestre del año, cifra poco menor la pérdida de 167 mil
566 millones de pesos en el mismo lapso de 2015.
Sus
ingresos de la empresa bajaron 12.4 por ciento en el periodo, a 274 mil 998
millones de pesos, mientras que la producción de crudo bajó 5.6 por ciento, a 2
mil 138 millones de barriles por día. Desde luego, esta es una de las peores
noticias para el gobierno que sigue dependiendo en gran medida de los ingresos
petroleros para administrar su presupuesto.
Pero
quizá lo más grave es que este mal comportamiento de Petróleos Mexicanos tiene
otras consecuencias muy graves. Por ejemplo, un funcionario de la Secretaría de
Economía, explicaba ayer en Tabasco que entre 7 mil y 12 mil trabajadores han
sido despedidos de Petróleos Mexicanos (Pemex), en Tabasco, a lo que se sumaron otros 20 mil trabajadores de empresas
privadas que han sido cesados por la crisis petrolera que enfrenta el país.
Nada más en Tabasco habría 30 mil personas que han perdido sus empleos.
Si
se toman en cuenta todos los despidos de Petróleos Mexicanos, desde que se
aprobó la reforma energética han sido alrededor de 20 mil en todo el país.
Lamentablemente se trata de personas que
tenían buenos salarios y capacidad de compra.
Por
eso, los despidos de la paraestatal no significan solo que una familia deje de
recibir ingresos, sino que, como lo señalaba el funcionario de la Secretaría de
Economía, hay un efecto dominó que comienza a afectar a la economía de toda una
región y hasta de una entidad. Al respecto, el INEGI presentó hoy su indicador
Trimestral de la Actividad Económica Estatal y los resultados saltan a la vista.
La economía de Campeche cayó 5.8 por ciento en el tercer trimestre, la de
Tabasco 4.0 por ciento, la de Veracruz 4.7 por ciento. En todos estos casos se
trata de entidades que están íntimamente ligadas a la actividad petrolera.
Incluso otras entidades con menor dependencia petrolera como Tamaulipas y
Chiapas, también se encuentran prácticamente en recesión.
Si
señaliza con más detenimiento, puede verse que todo el sur del país, se
encuentra en recesión o en desaceleración, en buena medida por la crisis
petrolera y los despidos de trabajadores de la paraestatal y de las zonas
cercanas a la paraestatal que generan un grave problema para la economía
interna.
Lo
curioso es que, mientras la mayor parte de los estados, 20 de 32 tuvieron una
caída en su economía durante el tercer trimestre, comparada con el periodo
anterior, hay sectores que están prácticamente en jauja. Concretamente, los
bancos.
En
sus reportes trimestrales, los cuatro principales bancos que operan en México
tuvieron utilidades en conjunto superiores a 60 mil millones de pesos. Hoy
Citibanamex, como ahora se llama oficialmente Banamex reportó que en lo que va
del año sus ganancias fueron de más de 12 mil millones de pesos.
Ayer,
Grupo Financiero BBVA Bancomer informó que acumuló una utilidad de 30 mil172 millones de
pesos, en los tres primeros trimestres del año y Santander dio a conocer que
sus utilidades de enero a septiembre fueron de más de 11 mil millones de pesos.
Banorte que reportó esta semana dijo que sus ganancias fueron de 14 mil
millones de pesos
Hasta
Interacciones. El banco de Carlos Hank Rhon, y en cuya sede dijo hace unos días
Enrique Peña Nieto que un presidente no se levanta todos los días para joder a
los mexicanos, tuvo utilidad acumulada en nueve meses de casi dos mil millones
de pesos.
Esto
quiere decir que los mexicanos le estamos dejando 185 millones de pesos diarios
de ganancias a tres bancos extranjeros y 55 millones de pesos diarios a la
principal familia de banqueros mexicanos, mientras que la única empresa cuyo dinero si se distribuye
entre todos los mexicanos, Pemex, prácticamente se encuentra en proceso
desmantelamiento.
Este son las
contradicciones de una política planeada para satisfacer la ambición de unos
cuantos y destruir lo que es para todos. A Pemex, despidos e impuestos, a los
bancos facilidades y condonaciones. Dice el filósofo del metro: esto no es
joder a México, es joder a los mexicanos.
*Comentario para Radio Eeducación/28 de octubre de 2016